Europa pierde peso en la escena mundial
La realidad es que en materia económica la verdadera angustia de Obama es la política financiera del Gobierno de Pekín, al que podría acusar de "manipulador monetario", como ha señalado Charles Grant, director del Centre for European Reform, (CER). En unos de sus trabajos recientes, el CER ha advertido de que "la Administración Obama se ha fijado como objetivo sellar una relación más estrecha con China, suscitando los temores de Europa de ver que este G-2 reduce más su influencia en el mundo".