El futuro de la UE queda tocado por el referéndum británico
"Aunque este referéndum sólo afecta a Reino Unido, el sentimiento de crítica a la UE lo comparten tantos países en estos momentos que es muy arriesgando culpar únicamente a la pérfida Albion", dice a este periódico el analista del Centre for European Reform, Rem Korteweg. A su juicio, cabe esperar una proliferación de referendos sobre cuestiones europeas en los países miembros. Y hasta ahora casi siempre ha ganado el ‘no’, aumentando la visibilidad de las fuerzas euroescépticas y propiciando una mayor fragmentación en la Unión.
En Holanda, donde una nueva ley permite convocar consultas no vinculantes con 300.000 firmas, ya se celebró una en abril sobre el acuerdo comercial de la UE con Ucrania, que fue rechazado. El siguiente referéndum será en Hungría después de verano sobre las cuotas de refugiados. “Los referendos son una herramienta muy popular estos días para hacer política en toda Europa”, apunta Korteweg.